
Emprendiendo el vuelo, así estoy. Tengo miedo, pero por dentro una especie de certeza me dice que vale la pena, que si he trabajado tanto para otros, hoy simplemente ese trabajo que también es para otros está enfocado de otra manera, no me puede ir mal.
Hay que aprender, como siempre, otras cosas, esos aspectos de mi mismo que están menos desarrollados, aprender a valorarme, verme quién soy, dónde estoy, de que estoy hecho.
La oscuridad se ilumina con el latido del corazón, mientras mas ansiedad, más se ilumina, de una vez por todas reclamar en mi interior mi fuerza.
Edo.